¡Para destruir a una persona, déjala que pida un préstamo para comerciar con criptomonedas!
Esto fue en los años 17 y 20, utilizando apalancamiento fuera de la bolsa para el comercio de criptomonedas.
¡Estoy de acuerdo contigo con ambas manos y pies!
Porque yo también hice lo mismo, en junio de 2017 aproximadamente tomé un préstamo de 300,000 y aposté todo.
Desafortunadamente, me encontré con 94, y el capital llegó a bajar a solo 30,000.
Esa época fue realmente difícil, pasaba los días en línea como un loco revisando las cotizaciones, tan ansioso que olvidaba comer y dormir.
Solo para determinar si habrá mercado en el futuro.
Ver originales
This page may contain third-party content, which is provided for information purposes only (not representations/warranties) and should not be considered as an endorsement of its views by Gate, nor as financial or professional advice. See Disclaimer for details.
14 me gusta
Recompensa
14
6
Compartir
Comentar
0/400
rugdoc.eth
· 06-27 19:45
¿Vaya, ya has hecho esto dos veces y no has aprendido la lección?
Ver originalesResponder0
PrivacyMaximalist
· 06-27 16:28
Toda una canción de tristeza de tontos.
Ver originalesResponder0
WagmiOrRekt
· 06-27 16:24
Después de pagar, esta noche salgo del trabajo y vuelvo a vivir de mis padres.
Ver originalesResponder0
DancingCandles
· 06-27 16:21
Realmente no puedo soportarlo, incluso al dormir estoy pensando en subir y caída.
Ver originalesResponder0
GasDevourer
· 06-27 16:15
¿Quién ha perdido hoy?
Ver originalesResponder0
ShibaMillionairen't
· 06-27 16:13
Perder te hace entender... Posición completa, rug pull.
¡Para destruir a una persona, déjala que pida un préstamo para comerciar con criptomonedas!
Esto fue en los años 17 y 20, utilizando apalancamiento fuera de la bolsa para el comercio de criptomonedas.
¡Estoy de acuerdo contigo con ambas manos y pies!
Porque yo también hice lo mismo, en junio de 2017 aproximadamente tomé un préstamo de 300,000 y aposté todo.
Desafortunadamente, me encontré con 94, y el capital llegó a bajar a solo 30,000.
Esa época fue realmente difícil, pasaba los días en línea como un loco revisando las cotizaciones, tan ansioso que olvidaba comer y dormir.
Solo para determinar si habrá mercado en el futuro.