El mercado de monedas estables vuelve a cobrar impulso: competencia global, Hong Kong a la vanguardia, oportunidades y desafíos coexistentes

Recientemente, el mercado de monedas estables ha vuelto a atraer la atención. Una empresa internacional de tecnología está planeando solicitar licencias de moneda estable en Hong Kong y Singapur. La empresa ha declarado que está acelerando sus inversiones y ampliando colaboraciones en la gestión financiera global, y que está llevando a cabo la aplicación a gran escala de innovaciones en IA, blockchain y monedas estables.

El Consejo Legislativo de Hong Kong ha aprobado el "Proyecto de Ley de Moneda Estable", que entrará en vigor el 1 de agosto. Varias instituciones han declarado que presentarán sus solicitudes lo antes posible, con la esperanza de contribuir a la construcción de un futuro centro financiero internacional en Hong Kong.

Las monedas estables son un tipo de activo virtual anclado a un activo específico, cuyo precio es relativamente estable y facilita la acumulación de confianza en su valor. Para garantizar la estabilidad, lugares como Estados Unidos, Reino Unido, Unión Europea, Hong Kong y Singapur han establecido estrictos requisitos para los activos de reserva de las monedas estables.

La "Regulación" de Hong Kong establece claramente que el valor de mercado de la combinación de activos de reserva debe ser, en todo momento, al menos equivalente al valor nominal de la moneda estable designada que no ha sido redimida y sigue en circulación, y que los activos de reserva del titular de la licencia deben ser de alta calidad, alta liquidez y con el menor riesgo de inversión.

Expertos de la industria indican que el objetivo de establecer un vínculo 1:1 es, en esencia, garantizar que las monedas estables que poseen los usuarios estén respaldadas por activos reales, evitando el "financiamiento vacío" o el riesgo de corridas. Esto ayuda a aumentar la confianza de los inversores y usuarios, y a promover la realización de transacciones de gran volumen.

Actualmente, el tamaño total de las monedas estables es de aproximadamente 230 mil millones de dólares, siendo las que tienen mayor cuota de mercado el USDT y el USDC, que están vinculados al dólar. Hong Kong está promoviendo activamente el proceso relacionado, con la esperanza de obtener una parte del mercado de monedas estables. Sin embargo, debido a la clara desventaja en la cuota de mercado, el futuro del desarrollo de la moneda estable en dólares de Hong Kong queda por verse.

Los expertos consideran que, para las monedas estables que no son en dólares, lo más importante, además de la aprobación regulatoria, es encontrar escenarios de aplicación para ampliar su función real y cuota de mercado. Los pagos transfronterizos se consideran un importante campo de aplicación potencial, ya que Hong Kong es en sí mismo un importante centro financiero y un punto de apoyo para el comercio de servicios.

Varios institutos financieros y empresas tecnológicas han comenzado a posicionarse en el mercado de monedas estables. Una empresa de moneda digital se ha listado recientemente en Estados Unidos, convirtiéndose en la "primera acción de moneda estable". Grandes empresas tecnológicas también están solicitando activamente licencias de moneda estable en Hong Kong, con el objetivo de fortalecer su posicionamiento en tecnología blockchain y servir mejor a sus negocios de pagos transfronterizos y gestión de fondos.

Sin embargo, el desarrollo de las monedas estables aún enfrenta numerosos desafíos. Las leyes y regulaciones aún no están perfeccionadas, y existen riesgos en la seguridad de los activos. Aunque hay ventajas en el ámbito de los pagos transfronterizos, aún deben resolverse los problemas de cumplimiento. La lucha contra el lavado de dinero y los altos costos de cumplimiento son también problemas que la industria debe superar.

Además, para los países con monedas fiduciarias no convencionales, la proliferación de monedas estables podría representar un desafío para su soberanía financiera, soberanía monetaria y seguridad financiera. En el futuro, buscar un equilibrio entre la innovación y la regulación será clave para el desarrollo de las monedas estables.